martes, 30 de agosto de 2011

Primeros Auxilios + Training from back of room

A veces me pasa que me toca capacitar en un tema a un grupo que ya tiene conocimiento / experiencia al respecto. De hecho, esto creo que es algo que pasa la mayoría de las veces.

En esos casos, empezar de 0 es una pérdida muy grande para ellos. Dicen los que saben de entrenamiento, que los 1ros minutos son los más importantes de una sesión. Donde el cerebro está más lúcido. Además, la sorpresa de algo nuevo genera una emoción que favorece el aprendizaje. Desperdiciar ese valioso tiempo, diciendo cosas que ya todos saben, sería una lástima.

La pregunta es, cómo se puede aprovechar?

Tengo un grupo de amigos, que hacen con frecuencia salidas en bici. Tienen distintos niveles de experiencia, conocimiento, pero desde hace un tiempo vienen viajando, haciendo salidas importantes, como el doble cruce de los andes, o casi 400km por las sierras de córdoba.

Hace un tiempo, nos empezamos a juntar, pizzas y cervezas de por medio, para que puedan llevarse nuevas herramientas a sus viajes que les permitan moverse con mayor seguridad. Una de ellas es por ejemplo primeros auxilios.

Tomando algunas ideas del libro Training from the BACK of the Room, arrancamos conectándonos con el tema planteando un accidente en un descenso en bici. Ellos tenían que anotar en post-it cada una de las acciones que harían y ordenarlas. Esto ya me dió una clara idea de que cosas conocían y cuales no.

(Arriba a la izq: 1ra fila los primeros 6 post-it de la fila son los del ejercicio. La 2da fila es el mismo ejercicio, pero hecho al final del encuentro)

Luego, continuamos tratando los temas que podrían ayudarlos a resolver mejor la situación. Usando algo visual y grande (papel afiche y marcador) fuimos poniendo los conceptos más importantes y enseguida, pasábamos a la práctica:

(Haciendo el ABCDE de la evaluación primaria)

(Limpiando heridas en una pata de chancho)

En el medio pasó algo que bajo otro paradigma de enseñanza hubiese sido negativo. Una hora más tarde, se sumó una persona al taller y a las pizzas. Esto, en otro contexto, hubiese sido un problema. Pero en este caso, resultó una oportunidad para que los chicos pudieran reforzar lo que aprendieron. Lo que hicimos fue pararnos frente a los afiches y que ellos contaran lo que habíamos hecho al nuevo compañero. Enseñar a un par es una de las maneras más efectivas de aprender.

Como cierre (es importante hacer un cierre para que nos caiga la ficha de lo que aprendimos), volvimos a hacer el ejercicio del comienzo y cada uno compartió lo que había aprendido. Aca de nuevo, lo que uno reconoce como aprendizaje propio, puede ayudar a reforzar el del otro.

saludos!

3 comentarios:

Ingrid Astiz dijo...

Muy bueno! Gracias por difundirlo.

Melón dijo...

Realmente los talleres son muy prácticos, Fernando es un gran didacta que plasma en la realidad pautas teóricas. De esa forma se hace muy sencillo absorber los conocimientos. Gracias Fer!

Patineta dijo...

Muy Bueno Fer!
La verdad que no hubiese sabido como curar a un chancho si se hubiese dado la oportunidad. Ahora si!